miércoles, 13 de febrero de 2008

«Star Wars» vuelve en verano al cine en forma de dibujos animados

Los herederos de Tolkien reclaman el cobro de sus derechos y piden cancelar el proyecto de «El hobbit»


El futuro de dos sagas en juego: una, con una buena noticia para sus fans; la otra, con la amenaza de un nuevo aplazamiento.

Los primeros, los que están de enhorabuena, son los seguidores de «La Guerra de las Galaxias». La Fuerza regresará a los cines el próximo verano con el estreno de «Star Wars: La guerra de los Clones», un largometraje de dibujos animados que servirá, además, para adelantar la nueva serie de treinta episodios y con animación 3D que en otoño debutará en Cartoon Network y TNT.
«Una nueva era de la saga de "La Guerra de las Galaxias" comienza en 2008». Con esta épica anunció Lucasfilm el estreno en los cines estadounidenses, el 15 de agosto, de «Star Wars: La guerra de los Clones». Las fechas de estreno para los cines del resto del mundo se anunciarán próximamente y no será hasta otoño cuando la serie se estrene en la pequeña pantalla, en capítulos semanales de media hora cada uno.
«Sentí que había mucho de la historia de "La Guerra de las Galaxias" todavía por contar», afirma George Lucas, que actúa como productor ejecutivo de esta serie, que supondrá, según apuntó, un paso adelante en el mundo de la animación por ordenador. Como la anterior serie de las Guerras Clon, realizada en animación tradicional y estrenada en 2003 en «Star Wars: La guerra de los Clones», relata los hechos acaecidos entre los episodios II y III, es decir, entre la «El ataque de los Clones» y «La venganza de los Sith».
Doble ración televisiva
Además de la serie de animación, Lucas también anunció una serie de acción real para televisión que uniría «La venganza de los Sith» con «La Guerra de las Galaxias», es decir, que relataría lo acontecido entre la nueva y la vieja trilogía de «Star Wars», pero centrándose en secundarios como Chewaka o Han Solo.

Sin tantas buenas noticias y mucho más negras se les presentan las cosas a los seguidores de Tolkien. Como si de orcos, elfos y enanos se tratara, los herederos de la obra del escritor británico y los estudios hollywoodienses andan otra vez a tortas por el tesoro de la Tierra Media. Tolkien Estate, la sociedad poseedora de los derechos de la obra literaria y que representa a la familia del escritor, ha demandado a New Line Cinema, la productora de la trilogía de «El Señor de los Anillos». Los herederos de Tolkien acusan a la productora de incumplimiento de contrato, al no haberles dado «ni un centavo» de los beneficios que obtuvieron con las tres películas dirigidas por Peter Jackson.

Este nuevo conflicto judicial puede dar al traste con las ya anunciadas películas de «El hobbit», la primera, prevista para 2010. Después de que Peter Jackson y New Line resolvieran sus diferencias, también por el vil metal, y el proyecto se configurara como dos películas -dirigidas Guillermo del Toro-, ahora todo vuelve a estar en el aire. Y es que la demanda también exige la anulación inmediata de todos los derechos que New Line tiene sobre la obra de Tolkien. La demanda acusa a New Line Cinema de incumplimiento de contrato, abuso de confianza y fraude, al no entregarle la parte proporcional de los beneficios obtenidos por la adaptación cinematográfica de la Trilogía del Anillo. Los demandantes reclaman que la productora debía haberles pagado un 7,5% de los beneficios de las películas, que ascienden a unos 6.000 millones de dólares, según los demandantes.

«Estamos muy decepcionados por la arrogancia de la productora», sentenció el abogado de la Tolkien Estate. Los herederos de Tolkien también lamentan que New Line no haya contado con ellos para nada a la hora de afrontar el proyecto de «El hobbit», y además de la compensación económica, piden a los tribunales que le retiren los derechos a New Line para realizar cualquier otra adaptación cinematográfica de la obra de J. R. R. Tolkien.

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